Todos llevamos batallas internas, historias que a veces pesan más de lo que mostramos. Encontrar un espacio donde ser escuchado de verdad puede ser el comienzo de un cambio profundo. Estoy aquí para acompañarte en ese camino.
¡Hola! por acá Ricardo.Trabajo como psicólogo clínico y acompaño, principalmente, a jóvenes adultos que viven con ansiedad o están atravesando desafíos emocionales y sexoafectivos, y buscan habitarse con más libertad y compasión.
Ser psicólogo no es liviano. Escuchar el dolor ajeno requiere mucha presencia, empatía y trabajo interno constante. Pero hay algo profundamente humano y transformador en ver cómo alguien que se sentía perdido comienza a validarse, a calmar su crítica interna, a hacer las paces con su historia. Esos momentos me emocionan profundamente y me motivan a continuar.
Además de la psicología, me gusta aprender sobre filosofía y ciencias naturales, en general, estudio porque deseo comprender mejor el universo en que vivimos y también a nosotros mismos. Y cuando no estoy trabajando, probablemente me encuentres caminando por la ciudad, tomando clases de baile, saliendo con mis amigos o viendo lucha libre. También tengo un lado artístico que va y viene, y disfruto cuando puedo conectar con él.
Mi modelo de atención se basa en la Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) de tercera generación, uno de los enfoques con mayor respaldo científico en el ámbito de la salud mental. Aun así, cada proceso terapéutico es único. Por eso, mi trabajo se apoya en un enfoque integrativo, combinando técnicas de distintos modelos terapéuticos según las necesidades y objetivos de cada persona.
Actualmente formo parte del equipo clínico en dos centros de salud mental en Viña del Mar, y además, atiendo de manera online a personas en distintas regiones de Chile y del extranjero. Esta experiencia ha enriquecido profundamente mi práctica, dándome una mirada más amplia y sensible frente a la diversidad cultural y relacional de cada individuo.
Mi intención en cada proceso es que la persona se lleve herramientas concretas para aplicar en su vida, y sobre todo, una forma más amable y compasiva de relacionarse consigo misma.
Psicólogo Clínico
Cuando comienzas un proceso de terapia conmigo, iniciamos una relación terapéutica.
Si alguna vez has tenido una conversación honesta y profunda, de esas que te mueven por dentro y te hacen reflexionar, entonces ya conoces la experiencia que busco recrear en mis sesiones.
¿Cómo se logra? Con autenticidad, confianza, escucha y tiempo. No se trata de tener todas las respuestas, sino de explorar juntos los matices de lo que estás viviendo y construir un espacio en el que, poco a poco, te sientas más libre para ser quien realmente eres. Porque una buena relación terapéutica es, sin duda, la base para que tu proceso de cambio sea exitoso.
La terapia no se limita a las horas que compartimos en el consultorio. De hecho, lo más importante sucede fuera de ese momento. Cada reflexión, cada ejercicio, cada vez que te detienes a observarte o actúas de forma distinta, estás dando forma a un cambio real. Aquí no estamos buscando soluciones mágicas; estamos construyendo, paso a paso, nuevas formas de pensar, sentir y actuar.
Por eso, aunque trabajamos con metas claras para medir tu avance, también hay avances que no entran en una gráfica: como cuando respondes con más calma a una situación difícil, cuando logras decir lo que antes callabas o simplemente cuando empiezas a sentirte más tú
Comenzar un proceso terapéutico es una inversión importante: de tiempo, de energía y también de dinero. Lo sé, y por eso quiero que el aspecto económico no se convierta en un obstáculo para que recibas el acompañamiento que necesitas.
Ofrezco distintas modalidades de pago que buscan adaptarse a tu realidad. Si estás en una situación económica compleja, también podemos conversar. No se trata de “regatear” la terapia, sino de encontrar un punto justo entre lo que tú puedes aportar y el compromiso que ambos asumimos con tu proceso.
La psicoterapia es un campo vivo: evoluciona, se expande, se cuestiona. Me actualizo de forma constante, ya sea a través de estudios formales, supervisiones clínicas, lecturas, congresos o talleres específicos.
Más allá de eso, la formación continua también es una forma de respeto. Respeto por ti, por tu historia y por la confianza que depositas en este espacio. Tu proceso merece un terapeuta presente, actualizado y dispuesto a seguir creciendo. Porque acompañar a otros también implica mirar hacia dentro, cuestionarse y seguir caminando.
“Nunca imaginé que hablar sobre mis dificultades emocionales podría ser tan liberador. Ricardo crea un espacio tan cálido y libre de juicios que me permitió abrirme y empezar a sanar. Lo que más valoro es que me ayudó a encontrar las herramientas para seguir adelante.”.
– A, 28 años.
“Con Ricardo he tenido una experiencia altamente satisfactoria, en primer lugar es un profesional que escucha atentamente a sus pacientes, logra involucrarse y percibir lo que uno está atravesando para luego brindar diferentes herramientas.
Desde que estoy asistiendo a terapia con él, he podido reconocer mis emociones, expresarlas y hacerme cargo de ellas, Afrontando las situaciones con más seguridad y mayor empatía por mi, pero también con el resto. Sin duda su acompañamiento ha sido clave en mi bienestar”.
– M, 32 años.
“Ricardo no solo me dio herramientas para enfrentar mis problemas, sino que me enseñó a verlos desde otra perspectiva. La terapia me ayudó a conectarme conmigo mismo y a ser más amable conmigo. Si estás buscando alguien que te entienda de verdad, él es la persona indicada”.
– B, 22 años.
Has click en “AGENDAR AHORA” Te dirigirá a la página de contacto. Completa el formulario con tus datos y envíalos. Esto me permitirá conocer un poco sobre lo que buscas en terapia
Te escribiré para conocernos mejor, contarte más sobre cómo trabajo, resolver tus dudas y asegurarnos de que esta sea la opción más adecuada para ti
Si decides continuar, coordinaremos la fecha y hora de tu primera sesión. Ya sea presencial u online, este será el primer paso para comenzar a trabajar juntos en tu bienestar